jueves, 15 de marzo de 2012

¿Por qué se fue tan rápido el verano?

¿Por qué se fue tan rápido el verano? De pronto ya nos vemos envueltos, nuevamente, en la misma rutina de siempre de correr de un lado a otro y de lidiar con personas ingratas. A veces nos encontramos con sorpresas inciertas, aunque esperables, para luego comprobar que, efectivamente, era mierda quién pensábamos que lo era. Y a veces más de una sola persona. Porque regresar al mundo real nos hace recordar la falsedad de algunas miradas supuestamente religiosas que ganan sonrisas vendiendo un mensaje bíblico que es una mentira dentro de sus propias vidas: es fácil llenar tu facebook con mensajes de Dios y atacar a la gente por la espalda. 

Frivolidades y sonrisas falsas, saludos distantes por compromiso. ¿Por qué se fue tan rápido el verano si la ausencia de realidad era tan perfecta? Era un ensueño. No era necesario admirar algo inexistente, algo incierto... algo pasado, algo erróneo. No era necesario sonreír sin sentirlo ni intentar ocultar pensamientos propios en "pro de un conjunto de trabajo". Círculo de frivolidades, de mentiras, un círculo vicioso donde Dios es la incetidumbre, la mentira, el amén de un trueque desfavorables: seguridad a cambio de razonamiento.