lunes, 9 de abril de 2012

"Estoy cayendo en lo mismo"

A propósito de una conversación con Chris, uno de los gringos con los cuales trabajo por Middlebury College, me doy cuenta de que la práctica profesional lleva a caer, inevitablemente, en una serie de acciones/reacciones  que en algún momento critiqué bastante duramente: es que la teoría dice que... es que no puede ser así... es que no cabe la menor duda que eso está mal y quienes la llevan a cabo también lo están... etc. Y resulta que parece que esa "maldad" está pasando a ser parte de mi esencia: wow. 

En mi época de colegio, aunque más bien en mi época de estudiante universitario de la "escuela" de pedagogía de la PUCV surgió mi duda respecto a muchas de las metodologías desarrolladas por nuestros profesores, las cuales fueron, obviamente, objeto de nuestra "visión crítica" en relación a las cosas que considerábamos estúpidas, pero que igual resultaban. Fue en ese contexto donde tuve la desgracia de leer a muchos autores que se autodenominaban como didactas y una serie de apelativos para subirse el pelo, cuando en realidad se trataba de un grupo de ociosos que se les ocurrió que sabían de educación y se pusieron a escribir estupideces que, claramente, demuestran que no tienen ni la menor idea del mundo. Qué Marco para la Buena Enseñanza... qué Pautas para una buena clase... pure shit. Lo que más he notado es que muchas de las cosas que estaban en la lista negra con las que, efectivamente, resultan. 

Hoy fue el caso de la nunca bien ponderada guía de aplicación que tanto deben estar odiando mis queridos estudiantes. Y es claro que tener que hacerlas cada cierto tiempo, aburre: confieso que tampoco me agrada demasiado realizarlas, sobre todo cuando se trata de temáticas que debo revisar por obligación. Y, finalmente, estoy cayendo en lo mismo que alguna vez critiqué, pero viendo que los resultados son pertinentes a lo que espero. Crap. Qué es lo que estoy haciendo. Aunque, a la vez, debo reconocer que confiesa a gustarme esa actitud de feel like a boss de demostrar que soy yo el que manda al final, luego de alguna clase en que no he tenido la atención que quiero. Finalmente, es el profesor el que debe tener el sartén por el mango aunque sin abusar, pero, mientras tanto, es bueno disfrutar ese pequeño poder, solo por un instante. 

Y, claramente, mientras se pueda, sonreír con actitud desafiante mientras piensas: Who's your daddy now, bitches? Prometo que no lo haré eternamente y que, en el fondo de todo, quiero que aprendan.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me haces taaanto reír xD

(probando comentarios desde el celu)

Machuk dijo...

Tranqui, Tranqui, eso lo único que genera es que el sistema siga siendo malo y para peor no das ningún aporte

es como cuando dicen "La pase tan mal en el mechoneo, que ahora voy a hacer lo mismo, total yo también lo viví"

una actitud completamente "penca"

encuentra tu "estilo de profesional" y seguramente marcaras diferencia, pero no caigas en lo cómodo que significa hacer algo porque te lo hicieron una vez o simplemente pq crees que da resultado.

quizás te falta la otra parte, esa que habla de lo bien que uno se siente cuando comienza a aplicar conocimientos de la U y que te hacen pensar "igual fue buena la cuestión"

Lo mejor de todo es que al parecer la práctica te ha hecho mas bien que mal, pq has razonado en cosas que quizas nunca pensaste en razonar.