lunes, 11 de febrero de 2013

Febrero estival

Hace poco estaba recordando de lo mucho que nos quejábamos de que enero hubiese estado tan frío y nuboso, considerando que supone ser el mes más cálido del año o que, de acuerdo a nuestro conocimiento tradicional, es lo que "debiese ser"; sin embargo, hace ya varios años que esas suposiciones han estado en cuestionamiento, es cosa de recordar que el año pasado fue marzo cuando se registraron las temperaturas más cálidas no solo de ese verano sino que de varios años. Cambio climático, europeización del clima (extremos) o qué sé yo; solo recuerdo que estaba en Las Cruces con 22° C mientras en Valparaíso se cocinaban con 34º C. 

Pero todo ese verano perdido de enero parece regresar ahora en febrero, cuando tradicionalmente hablábamos de un mes nuboso que nos mostraba el fin de las vacaciones, para que el sol regresara la primera quincena de marzo justo cuando volvíamos a clases: uniformes con temperaturas sobre los 20º C. Llevamos ya 11 días de febrero y creo que todos los días he querido quedarme tan solo en traje de baño sobre mi cama, sin hacer nada: es que el calor, realmente, produce esa sensación de letargo que afecta hasta las neuronas. Hoy, por ejemplo, pretendía dedicar la tarde a escribir algún cuento siguiendo la racha creativa que he tenido durante estas últimas semanas, pero el calor pudo más y decidí quedarme frente al pc jugando Candy Crush: sí, mis neuronas no podían contra la calidez atmosférica, sumado a que esta ciudad no tiene influencia marítima como para contrarrestar la falta de aire. Y eso que ni siquiera he salido directamente al sol, de lo contrario, estaría rostizado.

Ahora me sorprendo al ver que parece nublarse y, según leía, existía anuncio de lluvia para mañana en Juan Fernández: tambien oí que la lluvia de Juan Fernández es la que luego llega al continente. ¿Qué pasará? Creo que lo mejor, por ahora, es apagar el pc para ver si disminuye en algo el calor de mi pieza. Tengo varios libros que compré en Buenos Aires y ya está bueno que les dé una leída.

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