Desde el 19 de febrero y hasta el 23 del mismo mes se está desarrollando en Valparaíso un ciclo de cine al aire libre. Creo que todos tenemos nuestro sentimiento cinéfilo desarrollado de alguno u otro modo, ya sea viendo películas gringas-hollywoodenses de escaso contenido o de películas de cine independiente con nuevas propuestas y experimentación. Obviamente, no quiero decir que una u otra sea mejor, simplemente es una cosa de gusto (y bien se sabe, “en gustos no hay nada escrito”). En fin, ocurre que ayer martes 20 fuimos a ver los 2 cortometrajes y el largometraje que presentaban. He de decir que he tenido ocasiones en que he visto mejores producciones. Ninguno de los cortometrajes me gustó mucho; uno era documental y el otro, a mi parecer, muy simple.
Lo que suponía era que el largometraje producido por la Escuela de Comunicación de la Universidad del Mar iba a ser el plato fuerte de la noche, la película “Aguas Milagrosas”. Por el contrario, fueron 84 minutos de una historia predecible y demasiado poco original a mi gusto; volviendo al clásico tópico que durante mucho tiempo desarrolló el cine chileno: el barrio marginal y los personajes de escasos conocimientos culturales. Otra de las cosas que nos llamó la atención, fue la cantidad de guionistas que se desempeñaron en un guión tan poco sólido: 6 personas, un número que te hace pensar que te encuentras ante una producción mega-fantástica para un cine que ha ido creciendo de a poco. Cuando terminó la cinta y pudimos al fin marcharnos, lo primero que dijimos con mis amigos: “Mala la película” y recuerdo que intentábamos buscarle algo bueno.
Saliendo del espacio creado en plena Plaza Sotomayor, nos volvió el tema de que tenemos el proyecto de realizar un cortometraje. Y es algo que venimos diciendo desde agosto del 2006, luego de que unos amigos míos realizaran uno para presentarlo en una de las competencias para las alianzas del colegio. Ha pasado todo este tiempo y seguimos con la idea; nos hemos ido llenando de tecnología, de algún tipo de conocimiento de cómo realizarlo y de ideas, pero aún no hemos llevado a cabo algo. Hablábamos de la necesidad de hacer una prueba, pero en eso estamos. “Habrá que ponerse las pilas” como decía Arancibia, porque hace falta crear algo que innove todo lo que ya estamos acostumbrados a ver. Y sobre todo, luego de ver una película como la que vimos… ¡más ganas nos dieron de llevar a cabo un proyecto!
A veces me imaginaría actuando y otras veces me da miedo; pareciera que fuese menos complicado estar en la parte intelectual del proyecto (creación de ideas, guiones, detrás de cámaras, etc), pese a que igual lleva un gran trabajo que no suele verse. Creo que todos hemos tenido ese deseo de actuar en algún momento de nuestras vidas, pues más de alguna vez hemos hecho parecer algo que no es; algunos tienen una capacidad histriónica mucha más desarrollada que otros. Lo único que puedo decir en este momento, que a cada rato me dan más ganas de enfocarme de lleno a realizar un proyecto como éste, pero todo es un proceso y se necesita partir de algo… ahora, ¿cómo empezar, cómo hacer algo simple para poder ver cómo funciona el sistema? Probando… y me entusiasma bastante el asunto, me motiva a continuar escribiendo cuentos que puedan ser llevados a escena. ¿Quién sabe si algún día lleguemos lejos? Algo que comience como un hobby puede llegar dónde uno ni se imagina. Ahora a seguir pensando y a esperar hasta que llegue el “Insight” divino que nos haga realizar algo bueno… ¡algo mucho mejor que esa película!
Lo que suponía era que el largometraje producido por la Escuela de Comunicación de la Universidad del Mar iba a ser el plato fuerte de la noche, la película “Aguas Milagrosas”. Por el contrario, fueron 84 minutos de una historia predecible y demasiado poco original a mi gusto; volviendo al clásico tópico que durante mucho tiempo desarrolló el cine chileno: el barrio marginal y los personajes de escasos conocimientos culturales. Otra de las cosas que nos llamó la atención, fue la cantidad de guionistas que se desempeñaron en un guión tan poco sólido: 6 personas, un número que te hace pensar que te encuentras ante una producción mega-fantástica para un cine que ha ido creciendo de a poco. Cuando terminó la cinta y pudimos al fin marcharnos, lo primero que dijimos con mis amigos: “Mala la película” y recuerdo que intentábamos buscarle algo bueno.
Saliendo del espacio creado en plena Plaza Sotomayor, nos volvió el tema de que tenemos el proyecto de realizar un cortometraje. Y es algo que venimos diciendo desde agosto del 2006, luego de que unos amigos míos realizaran uno para presentarlo en una de las competencias para las alianzas del colegio. Ha pasado todo este tiempo y seguimos con la idea; nos hemos ido llenando de tecnología, de algún tipo de conocimiento de cómo realizarlo y de ideas, pero aún no hemos llevado a cabo algo. Hablábamos de la necesidad de hacer una prueba, pero en eso estamos. “Habrá que ponerse las pilas” como decía Arancibia, porque hace falta crear algo que innove todo lo que ya estamos acostumbrados a ver. Y sobre todo, luego de ver una película como la que vimos… ¡más ganas nos dieron de llevar a cabo un proyecto!
A veces me imaginaría actuando y otras veces me da miedo; pareciera que fuese menos complicado estar en la parte intelectual del proyecto (creación de ideas, guiones, detrás de cámaras, etc), pese a que igual lleva un gran trabajo que no suele verse. Creo que todos hemos tenido ese deseo de actuar en algún momento de nuestras vidas, pues más de alguna vez hemos hecho parecer algo que no es; algunos tienen una capacidad histriónica mucha más desarrollada que otros. Lo único que puedo decir en este momento, que a cada rato me dan más ganas de enfocarme de lleno a realizar un proyecto como éste, pero todo es un proceso y se necesita partir de algo… ahora, ¿cómo empezar, cómo hacer algo simple para poder ver cómo funciona el sistema? Probando… y me entusiasma bastante el asunto, me motiva a continuar escribiendo cuentos que puedan ser llevados a escena. ¿Quién sabe si algún día lleguemos lejos? Algo que comience como un hobby puede llegar dónde uno ni se imagina. Ahora a seguir pensando y a esperar hasta que llegue el “Insight” divino que nos haga realizar algo bueno… ¡algo mucho mejor que esa película!
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Just Let Go - Fischerspooner
Saludos!
kinkan ®
2 comentarios:
genial!! aki hacen falta actividades asiiii..
si te lo propones de seguro q algun día saldra a la luz una d tus historias, recuerda tienes talento y magia en tu escribir..
besitos
te postie en todas las entradas q nu habia postiaado, me dediq a leer todo..*
tau q tes muy bn
Miaux
oooh, nunca pense q te veria escribiendo algo asi xD
en fin, debe ser bkn tenerlo de hobby
hay q darle no mas xD
xaw
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